La Estrategia para la Seguridad del Paciente de Andalucía (ESSPA), focaliza también sus esfuerzos en el impacto que tiene sobre la seguridad del paciente en determinadas situaciones de vulnerabilidad, estableciendo objetivos específicos para sus poblaciones, y un análisis del riesgo específico que posee cada escenario asistencial, entre otros aspectos.
Una de las líneas propuestas en el plan de acción 2022- 2023 fue la “Elaboración y difusión de una guía marco para la prevención y empleo de contenciones en el ámbito de los centros sanitarios, asistenciales y servicios del Sistema Sanitario Público de Andalucía, así como en el ámbito de centros sociosanitarios”. Para dar respuesta a este objetivo se crearon alianzas con otras estrategias implicadas, Estrategia de Humanización, Estrategia de Bioética y Estrategia de Cuidados, así como con la Dirección General de Cuidados Sociosanitarios y la Dirección General de Asistencia Sanitaria del Servicio Andaluz de Salud, organizándose un grupo de trabajo con profesionales expertos de diferentes perfiles y ámbitos.
En esta línea, el grupo de trabajo creado dentro de la Estrategia para la Seguridad del Paciente del Sistema Sanitario Público de Andalucía, antes de definir las recomendaciones básicas, consideró necesario conocer la situación de partida, no solo del uso de las contenciones, sino también de los conocimientos de los profesionales al respecto.
Para este análisis de situación, que servirá de base para la elaboración de recomendaciones para la prevención del uso de contenciones, se consideró oportuno establecer dos fases, la primera se centró en los centros sanitarios públicos y cuyos resultados son los que se exponen en este informe; y en una segunda fase en los centros sociosanitarios.
Fuente: Estrategia para la Seguridad del Paciente de Andalucía (ESSPA)
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