Esta mañana se ha inaugurado en el Hospital Costa del Sol la Unidad de Prevención en Intervención Intensiva en Conducta Suicida ‘UPII Cicerón’. Se trata de una consulta que será atendida por su coordinador y reponsable del ‘Programa Cicerón’, el psicólogo clínico de la Unidad de Salud Mental Comunitaria (USMC) de Marbella y actual responsable del Programa de Enlace de Salud Mental del Hospital Costa del Sol, Miguel Guerrero Díaz.
La ‘Unidad UPII Cicerón’, primera en Andalucía de estas características, es un proyecto de colaboración entre la Unidad de Gestión Clínica (UGC) de Salud Mental del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria y el Hospital Costa del Sol.
Ésta será una extensión del ‘Programa Cicerón’ que se venía desarrollando exclusivamente en la USMC de Marbella (Albarizas). A partir de ahora, atenderá a todos los ususarios que lo necesiten pertenecientes al Distrito Sanitario de Atención Primaria Costa del Sol. Esto incluye a los pacientes de las tres USMC de la Costa del Sol (Fuengirola-Míjas, Marbella y Estepona) y sus respectivos centros de Atención Primaria.
A este acto han asistido los directores gerentes de la Agencia Sanitaria Costa del Sol y del Hospital Universitario Virgen de la Victoria; Luisa Lorenzo Nogueira y José Antonio Ortega Domínguez, respectivamente; el coordinador de Cuidados de la UGC de Salud Mental del Virgen de la Victoria, Antonio Reyes Taboada; y el actual coordinador en funciones de la USMC Marbella y responsable de esta unidad de prevención, Miguel Guerrero Díaz.
Esta inauguración -que ha tenido lugar en el salón de actos del Hospital Costa del Sol cumpliendo estrictamente las restricciones de aforo- coincide con la celebración, hoy día 10 de septiembre, del ‘Día Mundial de la Prevención del Suicidio’. Durante el acto, tras la participación de la mesa, se ha procedido a la lectura del Manifiesto de la Asociación Internacional de Prevención del Suicidio (IASP) -con el apoyo de la OMS- por parte del que hasta ahora ha sido coordinador de la USMC de Albarizas y enfermero especialista en salud mental, Emilio Andrade. A continuación Miguel Guerrero ha expuesto los resultados de los dos años del ‘Programa Cicerón’ y ha presentado los objetivos, estructura y funcionamiento de esta unidad.
Los objetivos de la UPII son, entre otros, ofertar una intervención mediante una psicoterapia específica y un seguimiento intensivo para pacientes con conducta suicida de riesgo (ideación autolítica y/o tras realizar un intento de suicidio), garantizar la continuidad asistencial tras el alta del servicio de Urgencias del Hospital Costa del Sol y optimizar la detección precoz de la conducta suicida en los dispositivos sanitarios de salud mental y de atención primaria. Además, se atenderán a supervivientes (familiares de personas fallecidas por suicidio) con el fin de ofrecer un apoyo psicológico que facilite la tarea de reelaboración de un duelo sumamente complicado.
El perfil de las personas a las que está dirigida esta unidad es: personas con trastornos psiquiátricos y/o psicológicos; con historia de intentos previos; con conducta suicida activa; supervivientes de suicidio; y pacientes vulnerables como personas mayores asisladas y/o con enfermedades crónicas.
Como unidad docente, la UPII ofertará una formación continuada a todos los profesionales sanitarios y no sanitarios que atienden en algún paso del proceso asistencial del paciente con conducta suicida, para capacitarlos con las competencias y habilidades necesarias que garanticen una atención sanitaria respetuosa, integral y de calidad. Ésta está dirigida tanto al personal del Hospital Costa del Sol, de los profesionales de la UGC de Salud Mental y de los Equipos Básicos de Atención Primaria del Distrito Costa del Sol; como a los profesionales en formación -MIR, PIR y EIR- que así lo soliciten.
Por otra parte, desde esta unidad se desarrollarán también distintos proyectos de investigación, se realizarán publicaciones científicas y se divulgarán los resultados asistencias de la unidad.
Como agentes de prevención, desde la UPII se trabajará conjuntamente con organismos como las universidades públicas, asociaciones de usuarios y familiares, medios de comunicación locales, corporaciones y centros educativos. También colaborará con el desarrollo de las acciones de prevención del suicidio que marca el III PISMA ( Plan Integral de Salud Mental de Andalucía), se ofrecerá asesoramiento a profesionales y también apoyo para la elaboración de guías y procedimientos a otros centros sanitarios.
Esta nueva unidad ocupará un espacio en la planta semisótano del Hospital Costa del Sol y atenderá a los pacientes los martes, miércoles y jueves de la semana, en horario de 8 a 15 horas. En ella se dará asistencia a aquellos pacientes que hayan sido atendidos en la unidad de Urgencias tras haber realizado una tentativa de suicidio y después de haber sido valorados por un especialista en salud mental de enlace de este hospital. También a los que proceden de la USMC referentes del Distrito Sanitario Costa del Sol (Fuengirola, Marbella, Estepona) cuando se detecte en algún usuario la intencionalidad suicida y alto riesgo de paso al acto. Además, también se asistirá a pacientes post-alta tras ingreso en la unidad de hospitalización de salud mental del Hospital Universitario Virgen de la Victoria de Málaga tras ingresar por una tentativa suicida grave; y a supervivientes de suicidio con grado de parentesco con la víctima conyugal, parental, filial que requieran apoyo a través de terapia grupal.
Entre las funciones a llevar a cabo desde la UPII destacan: la valoración y clasificación del riesgo suicida y el seguimiento terapéutico intensivo de pacientes (6 meses tras el alta de la unidad de hospitalización de salud mental, 12 meses tras un intento de suicidio y 18 meses para los intentos de suicidio medicamente graves (ISMG), es decir a aquéllos que utilizan métodos altamente letales y que han comprometido seriamente su supervivencia. Además, esta unidad trabajará con una actitud asertiva-comunitaria para evitar las pérdidas y abandonos, garantizando la continuidad asistencial y adherencia al tratamiento, para detectar precozmente la conducta suicida e intervenir en los momentos de crisis.
Balance ‘Programa Cicerón’
Durante sus dos años de funcionamiento, el ‘Programa Cicerón’ ha obtenido unos resultados satisfactorios en cuanto a que ningún paciente del grupo atendido en el seno de este proyecto con ideación suicida realizó un intento de suicidio. Además, en el grupo que había realizado un intento de suicidio, ningún paciente realizó un reintento posterior en los siguientes 12 meses al finalizar el tratamiento. Las tasas de recaídas en el colectivo de ideación autolítica severa ha sido menor al 7%. No se ha ingresado de forma programada a ninguno de estos pacientes y tampoco se ha detectado defunción por suicidio declarada.
El 100% de las citas para primera valoración tras derivación se ha llevado a cabo en un plazo inferior a 7 días y se han registrado un total de 153 primeras consultas y 1.967 revisiones registradas entre ‘consultas de revisión programadas’ e ‘intervenciones en crisis urgentes’.
En cuanto al cumplimiento del programa terapéutico es importante destacar que un 95,1% de los pacientes ha finalizado el seguimiento; y apenas un 4,8% abandonó el mismo sin el alta terapéutica. Un 21% del total acudió con ideación suicida estructurada, un 51,3% tras realizar un intento de suicidio no grave y un 27,7% tras un intento de suicidio médicamente grave y violento. El 71,8% de la muestra fue atendida en modalidad de seguimiento intensivo individual (por presentar riesgo de suicido moderado o grave), mientras que el 28,2% restante fue atendido en modalidad grupal mediante un taller de psicoeducación (por presentar riesgo leve o sin clara intencionalidad suicida).